Por:   Adriana Linares

Ayer, Tamaulipas, anteayer Michoacán, Morelos, Guerrero,etc. 
Hoy es Jalisco... y mañana puede ser tu estado o quizá ya lo es.

Pero el gobierno insiste en seguir haciendo más de los mismo: Insiste en permitir los consumos y "prohibir" la venta drogas para que suban de precio y se vendan por las mafias.

Los políticos le dan el mercado a las mafias. Las mafias le dan dinero a los políticos. Los políticos le dan protección. Se cierra el círculo.

La prohibición genera un mercado "libre" que se promueve entre los jóvenes. Genera también la creación de drogas sintéticas cada vez más peligrosas que se venden sin control alguno.

Los consumos suben, los riesgos a la salud también suben.

Más de 8 mil ejecutados por año porque las mafias del narcomenudeo se pelean entre sí, porque el negocio genera competencia y la competencia de mercados negros siempre es violenta.

Caen algunos capos, pero el mercado, las ganancias y los políticos involucrado no caen.

Una vez en control de la plaza, las mafias se extienden a otros negocios y delitos.

Terror en la población.

¿Qué utilidad tiene el temor? Es el medio preferido por los políticos de bajo nivel de conciencia para controlar a la población.

La sociedad atemorizada y des-informada se somete.

Propaganda de guerra de la narco-política: "No quieran hacer un cambio de política, eso puede ser peor; sus hijos estarán en mayor riesgo".

Los políticos evaden el tema de cambio en la estrategia.

Si algún sector pensante propone que las drogas se controlen por los médicos-como debe ser- a través del sector salud, los políticos desechan fácilmente la propuesta con una gran mentira: "Eso seria un caos, queremos un México libre de drogas y no vamos a promoverlas". Mentira, el sector salud no promueve la morfina ni ningún otro medicamento, las controla y protege a la sociedad. Los médicos lo saben.

Más temor. Más control. Nada cambia. Más ganancias, más control político. Más caos. Más impunidad. Más corrupción.

La sociedad deja pensar. Ya no entiende dónde está el problema.

Más ganancias, más control.

¿Hasta cuando?

Hasta que la mayoría entendamos este mecanismo y lo denunciemos.